El Socialismo con características chinas se defiende

Workers World Online
Publicado el 17 de marzo de 2006

[Traducción: F.G. Montoya]

El Congreso Nacional Popular de China "se halla consumido por un debate ideológico sobre el socialismo y el capitalismo, que muchos habían supuesto que había sido enterrado por el largo proceso de rápido crecimiento económico de China”, según un artículo publicado el 12 de marzo en el New York Times.El debate obligó al gobierno chino a aplazar una ley preliminar para proteger los derechos de propiedad, la cual “se había esperado que obtuviera su aprobación formal sin problemas”. También destacó "la influencia renaciente de un grupo pequeño pero significativo de académicos y asesores políticos de tendencia socialista”, según el Times. “Estos anticuados pensadores izquierdistas se han aprovechado de la creciente diferencia de ingresos existente en China y del aumento del malestar social, para plantear dudas sobre lo que ellos ven como la búsqueda precipitada de la riqueza privada y el desarrollo económico dirigido por el mercado”.El debate, según el Times, tiene su origen en una crítica a la ley de propiedad de Beijing realizada por el profesor universitario Gong Xiantian, quien atacó a los redactores de la ley por “copiar el derecho civil capitalista igual que esclavos”, y por ofrecer la misma protección “al coche de un hombre rico que al bastón de un mendigo”.Sobre todo, ”el escritor protestó por el hecho de que la ley no aclaraba que “la propiedad socialista (colectiva) es inviolable”.




El presidente Hu Jintao ha tenido en cuenta todas estas críticas, e incluso ha aconsejado que los cuadros del Partido estudien la situación de Cuba y Corea del Norte para aprender a alcanzar la estabilidad social. Además, numerosas películas sobre la contrarrevolución de 1991, liderada por Yeltsin en la Unión Soviética, son mostradas a los cuadros del Partido con el fin de advertirles sobre lo que ocurre cuando el socialismo es destruido. Este debate tiene lugar sobre el trasfondo de 200 protestas al día ocurridas en el año 2005, al rebelarse los trabajadores y campesinos contra las "reformas" capitalistas. El Presidente Hu y el primer ministro Wen Jiabao han lanzado una campaña para disminuir la diferencia de ingresos entre la ciudad y el campo, bajo el lema de "un nuevo campo socialista".La tierra en China es arrendada por los agricultores del pueblo, y no puede ser vendida legalmente. Los medios de comunicación imperialistas expresaron su decepción por el hecho de que este nuevo plan agrario respetara la prohibición de las ventas privadas de tierra. Sin embargo, los izquierdistas chinos también se sienten decepcionados porque el gobierno no ha replanteado con firmeza el carácter social de la propiedad de la tierra.



El resurgimiento de la izquierda en China es un revés para las clases dirigentes de los países imperialistas, que confiaban en que el socialismo se encontraba en una espiral descendente de dirección única, y en que inevitablemente iba a ser vencido por la contrarrevolución capitalista --por el progreso evolutivo irresistible de la penetración global capitalista en China, y por el avance inevitable de la burguesía doméstica hacia el poder político mediante la conquista del partido y del gobierno.Este debate ideológico y político supone la aparición de una representación -en diversas formas, más o menos consistentes- de los intereses de clase de cientos de millones de trabajadores y campesinos de China que han estado sometidos al inconveniente terrible de las "reformas" capitalistas, que han acompañado al rápido crecimiento económico y al abandono de las garantías socialistas.El debate parece ser un primer paso en lo que puede ser una lucha larga y difícil contra intereses de clase capitalistas firmemente enraizados. Pero la aparición de significativas corrientes políticas izquierdistas, que tratan de alejar a China del camino capitalista para acercarla al camino socialista, y que además están recibiendo la atención de los dirigentes chinos, es un signo esperanzador para todos los partidarios de la gran revolución socialista china de 1949.

http://www.workers.org/2006/editorials/china-0323