Nuestra lucha no se trata de una mera elección estrecha entre opciones electorales dentro del actual régimen, sino de apostar por formas de organización económica y espiritual, cualitativamente superiores a la civilización burguesa, donde se garantiza la emancipación del proletariado y la democracia real. Es la lucha popular por la conquista de la civilización socialista, partiendo del estudio científico de las bases materiales que lo posibilitan y con el objetivo último del comunismo.

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16 de marzo de 2008

La carcel de Doftana

Nuestra amiga Carla nos envía desde Rumanía este interesante texto.
Enlace a la publicación Eco-Nature

Se habla mucho hoy en día sobre las "carceles comunistas", sobre el "genocidio comunista", sobre la manera en la que los comunistas "exterminaron a la élite del país". Se habla siempre sobre la necesidad de "condenar el comunismo", comunismo al que se le echa la culpa de todas las injusticias de después de 1990, olvidándose que nosotros, desde hace más de 17 años vivimos en el capitalismo. Se habla siempre de Sighet, Aiud, Gherla como cárceles políticas, pero nadie se pregunta si el régimen burgués ha tenido cárceles en los mismos sitios.

La siemple examinación sumaria de los hechos que han pasado solo en una de estas cárceles, en Doftana, nos muestra que el régimen burgués tan idealizado y puesto como ejemplo por los "seguidores" del capitalismo, ha sido en realidad un régimen de la represión feroz dirigida principalmente contra los comunistas.

Inaugurada en 1895, la cárcel de Doftana (comunidad de Prahova), se convirtió, especialmente después de la ola revolucionaria de 1918-1920 que llevó a la creación del PCR (Partido Comunista de Romanía), en una cárcel política.

Desde 1919, las fuerzas de represión burguesas demostraron plenamente su brutalidad, asesinando en esta cárcel a J.C. Frimu.

En 1921 han sido detenidos los que participaron en el congreso de inauguración del PCR. En 1922 se llevó contra los comunistas el juicio del Valle Spirii, Al final, en 1924, el PCR es ilegalizado y durante dos décadas los comunistas militaron en la clandestinidad, siendo las personas más acusadas y perseguidas de Romanía, por el simple hecho de que luchaban por la igualdad y justicia social.

Existieron muchas cárceles donde los comunistas eran encarcelados y torturados, pero la más siniestra era la de Doftana. Desde antes de la creación del PCR, aquí habían sido encarcelados muchos de los campesinos que participaron en la guerrilla de los campesinos de 1907, algunos de ellos pasando entre 10 y 20 años entre sus muros.

Después de la creación del PCR, Doftana era conocida como "La Bastilla Rumana". Una de las formas de tortura más utilizadas era el pegar a los detenidos con una vena de toro.

Para resistir, los detenidos adoptaban diferentes formas de protesta. Una de ellas era la huelga de hambre, por ejemplo en 1929 hubo una que duró 43 días y finalizó exitosamente: a los detenidos comunistas se les reconocía el estatuto de presos políticos y consiguieron ciertas facilidades, aunque después de 1933 y en especial después de 1935 el régimen volvió a endurecerse. Otra forma de protesta era el grito colectivo: "¡No pegues!". Según un ex-guardián: "En Doftana, cuando pegaban a alguno, ese empezaba a gritar "¡no pegues!" y todos los presos empezaban a gritar lo mismo, y se escuchaba hasta Câmpina.Mire el eco que tiene ahora mismo, imagínese cuando gritaban más de 350 presos a la vez. ¿Qué más iban a hacer? Tenían que parar"



Después del endurecimiento del régimen de detención, urgido como consecuencia de la gran huelga de los trabajadores de ferrocarril y de la industria petrolífera en 1933, en Doftana empezaron a centrarse practicamente en exterminar a los comunistas. Este hecho se ha podido comprobar claramente en 1940.

El 22 de octubre de 1940, un terremoto causó grandes daños en la estructura de la cárcel, El comité de presos políticos envió un escrito en el que pedían el desalojo de la cárcel, ya que existía peligro de derrumbe en el caso de que hubiera una réplica.

Una comisión de supuestos "expertos" apreció que no había peligro. Era en verdad la decisión de la sentencia de muerte de los presos, ya que una réplica era inminente. Y se produjo en la noche del 9-10 de noviembre de 1940. Fue el terremoto más devastador de Romanía en ese entonces. Los muros de la cárcel se colapsaron y numerosos presos revolucionarios entre los cuales estaba Ilie Pintilie, miembro del Comité Central del PCR, perdieron la vida.

Después de 1944 la cárcel fue reconstruida parcialmente y convertida en museo. pero después de 1990 ha llegado de nuevo a un estado lamentable y se hundía en el olvido.

Los gobernantes pro capitalistas adoptaron esta política porque se intenta ocultar sistemáticamente la verdad sobre el terror capitalista, llevada a cabo por el régimen de triste recuerdo de antes de 1944 en contra de la oposición, pero en primer lugar, en contra de los comunistas.

Queda como nuestro deber, de los comunistas de hoy en día, honrar la memoria de las víctimas de este terror, como J.C. Frimu, Ilie Pintilie y muchos más, y hacer lo posible para que la cárcel de Doftana no quede enterrada en el olvido.

Por: Radu M. Florian

-Traducición del texto original publicado por el nPCR

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