El ejército patriota antiimperialista egipcio fue liquidado en 1971.

El general patriota Muhammad Fawzi, a la izquierda en la foto, recibe al camarada vicepresidente chino Chu En Lai.

El "Comandante rojo" pro comunista Jaled Mohiedinne, Premio Lenin de la Paz en 1970, encarcelado por el traidor Sadat.

El Ché con Nasser y el primer ministro y oficial revolucionario Ali Sabri derrocado y encarcelado por Sadat

La alta oficialidad egipcia sobornada por el Pentágono y la CIA no es de fiar y las masas egipcias no deben confiarse y dejar su gran victoria democrática en sus manos. El viejo Ejército egipcio de Nasseri, patriota, antiimperialista y favorable a la construcción del Socialismo fue eliminado en mayo de 1971 mediante un traicionero golpe de estado por el reaccionario Anuar el Sadat. Inesperadamente hizo detener al coronel Ali Sabri, vicepresidente de la República y líder de la Unión Socialista árabe, el partido de Nasser, al ministro del interior y jefe del servicio de seguridad Sharawy Jumaa, al ministro de defensa, valiente general Muhammad Fawzi partidario de la amistad con la Unión Soviética, al comandante Jaled Mohieddine, miembro del Consejo de la Revolución, Premio Lenin de la Paz en 1970 y así hasta 100 militares honestos quienes fueron condenados a cadena perpetua y pasaron muchos años en prisión. El traidor Sadat y su compinche Mubarak entregaron la dirección de las fuerzas armadas al enemigo imperialista y sionista desde 1978. Hoy el pueblo egipcio busca ansiosamente nuevos Nasser, Ali Sabri y Mohieddine entre la oficialidad joven y la tropa. Sigue la lucha por construir una República egipcia democrática, independiente, panárabe y antiimperialista, faro de la construcción socialista en Oriente Medio, Mediterráneo y África.